Esta oración edificante a San Ramón Nonato es un verdadero refugio para quienes buscan callar las malas lenguas y encontrar paz en medio de las injusticias. Invocamos al poderoso intercesor que, con su luz divina, silencia las bocas traicioneras y disuelve toda envidia y maldad que rodean nuestra vida. Esta súplica, cargada de fe y devoción, pide la intervención celestial de San Ramón Nonato, el santo que coloca un candado sagrado en las palabras venenosas y transforma cada ataque en un silencio pacífico. Con un lenguaje que exalta la confianza en el poder de Dios y en la protección de los santos, esta oración es un verdadero escudo contra calumnias y chismes, convirtiendo todo mal en bendición. Reza con fervor y siente la presencia protectora de San Ramón Nonato, quien, con su manto sagrado, aleja las energías negativas y nos envuelve en una corriente de amor, serenidad y victoria sobre el mal.