La formación general que los juristas reciben a nivel de grado está dirigida a perfeccionar la capacidad de intervenir en casos, litigios o procesos. En tal formación, sin embargo, suele ser escasa la preparación que se recibe respecto de los desafíos que impone la interpretación jurídica. El objeto de este módulo es introducir a jueces, y juristas en general, tanto en la teoría de la interpretación jurídica, incluyendo preliminares de la teoría de las normas, como en los procedimientos y directivas que conforman las distintas técnicas interpretativas. La finalidad de brindar estas herramientas es que jueces y juristas puedan aprovecharlas para elaborar sus argumentos al interior del proceso judicial. El empleo de estos recursos suele conferir mayor estabilidad y previsibilidad a su trabajo.