Manolo Torres nació en 1965 en calle Carabeo en Nerja (Málaga), desde muy pequeño se apasionó por el flamenco y por los diversos estilos de la canción española. Manolo nunca pretendió ser un imitador de Antonio Molina ya que como él no habrá otro, pero este nerjeño de gran calidad artística ha sido uno de los pocos cantaores que sube a un escenario cantando y tocando los tan difíciles y distintos palos del flamenco, recordándonos a juan Breva o al piyayo. Manolo Torres no tuvo maestro ni en el cante ni en el toque, todo lo aprendió de oído por su gran afición a este género. Se atrevió con toda clase de música, desde Elvis Presley hasta Pavarotti y en el flamenco con canciones de Manuel Vallejo, Niño de la Huerta, Marchena, Molina, Farina... Tocó la guitarra miles de veces a sus amigos aficionados al cante de Nerja y los pueblos de alrededor donde es muy querido.